Bankomunal reunida |
El Sol de Margarita- Daniela Alejandra Oviedo
Salomón
Raydán es el responsable de la transformación del método más antiguo de ahorro
que tiene el venezolano, conocido como "san" o "susú", y de
cambiar la realidad económica de muchas personas. A través de talleres de
capacitación y la instalación de los Bankomunales con K, Raydán le ha brindado
a las poblaciones conocimiento sobre cómo administrar sus finanzas a través de
un método muy parecido a los populares san o susú, que a menudo organizan
vecinos para "rendir" y ahorrar sus finanzas.
Hace más
de 17 años, Raydán quien es un emprendedor y experto en finanzas populares, se
propuso investigar a fondo los mecanismos asociativos informales que establecen
las comunidades. La investigación determinó que éstos pueden ser mejorados y
además, que la gente sí tiene dinero como para autofinanciarse.
"Nosotros
le mostramos al mundo que los pobres son autofinanciables", sostiene
Raydán.
Por ello,
se ha dedicado a través de la Fundación de Financiamiento Rural (Fundefir), su
fundación, a enseñar a las distintas comunidades para que puedan darse
servicios de ahorro y crédito, sin tener que depender de la banca o recurrir a
prestamistas.
Raydán
comenzó una nueva clase de microfinanzas en la península de Macanao, en la
población de Boca del Río. Más adelante, su método tan bien estudiado sería
material de exportación hacia otros estados del país e incluso a destinos
internacionales. Actualmente los Bankomunales tienen presencia en 50
poblaciones de Venezuela, en entidades como el Distrito Capital y los estados Sucre, Zulia,
Miranda, Vargas, Delta Amacuro y Nueva Esparta.
Bankomunales
con K
Los
Bankomunales son una metodología que permite la organización de las finanzas
personales y potenciar la capacidad de ahorro. Son organizados por miembros de
una comunidad que deciden ponerse de acuerdo para ahorrar parte de sus ingresos
y son autogestionados por sus propios integrantes, no dependen de la fundación.
La función
de Fundefir es únicamente asesorar y capacitar a los miembros del nuevo
Bankomunal a través de talleres. Además, los ayudan a establecer reglas básicas
para el buen funcionamiento y éxito del banco.
Funcionan
con una estructura tipo sociedad, en la que los que deseen unirse pueden
comprar acciones y así ser parte de él. El precio de la acción y las tasas de
interés para préstamos son fijadas por cada Bankomunal de cada sector, de
acuerdo a sus necesidades, es decir, nunca se trata de una tarifa fija para
todos los Bankomunales.
En el
Bankomunal los integrantes pueden comprar y vender acciones y solicitar
préstamos. Una
de sus ventajas es que tienen la capacidad de aprobar préstamos pequeños que
probablemente la banca privada no podría.
La
fundación no promueve un programa de créditos sino de carácter educativo e
informativo. Difunden educación y formación financiera con el fin de contribuir
con el progreso económico y social de las comunidades.
Daniela Alejandra Oviedo
El Sol de Margarita
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